Palabra de llagareru: un sello de autenticidad
La contraetiqueta de nuestra sidra no es solo un distintivo de calidad, sino también un compromiso firmado por quienes la elaboran. Cada botella lleva la firma del llagarero, reflejando el cuidado y la dedicación con los que ha sido elaborada.
Este sello de autenticidad es el resultado de un riguroso proceso de selección en el que un jurado experto cata a ciegas cada lote de sidra, evaluando su color, espalme, aroma y sabor. Solo aquellas sidras que alcanzan una calificación sobresaliente reciben la contraetiqueta de Sidra Seleccionada.
Así, cuando descorches una de nuestras botellas, sabrás que no solo estás disfrutando de una sidra excepcional, sino del buen hacer y el compromiso de su propio llagarero.


